ENDESA solicita el cierre de las centrales de As Pontes y Carboneras
La compañía, que el pasado mes de septiembre anunciara ya la aceleración final de la quema de carbón, puso como data límite de funcionamiento el año 2022. Al final, ENDESA, decidió este viernes iniciar el proceso de cierre de las instalaciones de As Pontes y Carboneras (Almería). Según la empresa, este cierre se debe a la profunda modificación de las condiciones de mercado (se ha registrado un incremento sustancial en el precio de los derechos de CO2 y una caída significativa del precio del gas), que a su juicio «ha llevado a que estas centrales hayan sufrido una importante falta de competitividad en la cobertura de la demanda de mercado y a que, por consiguiente, se haya acentuado su exclusión de este», explicaban en un comunicado.
Por estos motivos, y ante la falta clara de perspectivas de mejora en el futuro, la empresa ha tomado la decisión de promover la discontinuidad de la actividad de las centrales de As Pontes y Carboneras en Almería. Desde que lo anunciara el pasado mes de septiembre, ENDESA, ha analizado alternativas de funcionamiento de las plantas mediante el empleo de biomasa, que dicen que no han dado un resultado satisfactorio. “Tanto desde un punto de vista técnico y medioambiental, como económico”, se escuda la compañía en estas razones para calificar estas alternativas como inviables para su ejecución.
El cierre, un sí pero no o un no pero sí
Aunque este viernes ENDESA haya solicitado la petición de cierre de las centrales, dicen que hay cabida para excepciones al cierre y dotar a las zonas de otras actividades. Esto es por dos vías: si los resultados de las pruebas adicionales a las alternativas sean satisfactorios y se lleven el visto bueno de la empresa; y cambiar los Megavatios (MW) térmicos por MW eólicos y solares, y todo apunta a que ésta última es la que mayor peso tiene.
La compañía se reserva el derecho de desistimiento de esta solicitud (de cierre), en su conjunto o parcialmente, en el supuesto de que, como consecuencia de las pruebas adicionales de combustión con distintas mezclas de combustible, tanto en la central de As Pontes como en la de Carboneras, que se realizarán en los próximos meses, pudieran variar los resultados y garantizar la viabilidad de las plantas. Añade el comunicado que (con un “algo” de #Greenwashing), “la solicitud es plenamente coherente con el objetivo de conseguir un sistema energético totalmente descarbonizado en el año 2050, compromiso compartido y apoyado por la compañía y por todos los países que han firmado los acuerdos de la Cumbre de París COP21”.
En paralelo a la solicitud, ENDESA ha presentado para cada planta un proyecto de actuaciones para atenuar el impacto provocado por la disminución de actividad, Plan Futur-e. Según la compañía “pretenden” promover el desarrollo de actividades económicas y generación de empleo en las zonas en las que se encuentran ubicadas las dos centrales. En los planes Futur-e, ENDESA, incluye inversiones en energías renovables. En concreto, propone ahora substituir los 1.468 megavatios de potencia de la central térmica de carbón de As Pontes por otros 1.505 en energías renovables en Galicia (entre 2020 y 2026), con una inversión de algo menos de 1.600 millones y generando, dicen, “más de 1.250 empleos de media anual durante los 6 años de la fase de construcción y 125 para la operación y mantenimiento durante los siguientes 25”. Y parece que de esta capacidad ya está confirmada la conexión de 165 MW.
Esto e Galicia, y en el caso de la central de Carboneras, la compañía muestra su interés en la construcción en la provincia de Almería de parques solares fotovoltaicos y eólicos con una potencia de más de 1.520 MW, con una inversión estimada superior a 1.200 millones de euros, y generaría 700 empleos de media anual en la fase de construcción (seis años) y otros 110 para la operación y mantenimiento (25 años). Al igual que en nuestra comunidad, ya hay 250 MW con conexión confirmada, según apunta ENDESA.
Quiero prometer y prometo… ¿mantener los puestos de trabajo?
Adelantaba ENDESA en su comunicado que los puestos de trabajo de los empleados directos de las centrales, 174 en As Pontes y 113 en Carboneras, se mantendrán. Dice que lo hará a través de un proceso de recolocación y de formación, y añade que contarán con este personal para realizar las labores de desmantelamiento (con una duración estimada de 4 años) de las instalaciones y para el mantenimiento de los nuevos parques renovables que tienen previsto.
Además, dice, que a lo que se refiere a los trabajadores de las auxiliares, pretenden priorizar la contratación de personal de las zonas también para realizar las labores de desmantelamiento y el desarrollo de las instalaciones renovables que en principio dicen que construirán.
Ahora sólo queda saber a costa de qué y de quién se realizará todas estas promesas que este viernes presentaba la compañía ENDESA.