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EL TURISMO ANTE SU TRANSICIÓN HACIA LA SOSTENIBILIDAD

V Encuentro Internacional de Economía Circular. Donosti, 1 – 3 de febrero de 2023

Benito García, Director ITE ambiental y Presidente de la Asociación Galicia Ambiental

El Desarrollo Sostenible de los destinos turísticos constituye un procesointegrador trasversal, como lo son todas las políticas ambientales, que atañe a los responsables públicosdel destino, la ciudadanía, sus empresas y servicios y los mecanismos utilizados para lapromoción del destino y la forma en que desarrollamos la comunicación con los turistas. El desarrollo turístico, en el marco de una Economía Circular, debe entender y aplicar los mismos principios, asentados en el triple criterio de orientación de la GESTIÓN SOSTENIBLE: ambiental, económico y social. La incorporación de criterios como la capacidad de carga de un territorio (sobre todo de cascos históricos de villas y ciudades) deben ser aspectos a integrar en la planificación turística. En esa capacidad de carga va implícito el éxito económico pero también el social: expulsar a los residentes o perder las señas de identidad es la peor de las posibles consecuencias de la “gentrificación”.

EL ECOSISTEMA DE LA SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA

El horizonte de trabajo, la hoja de ruta, bien puede estar marcado por la Agenda Urbana Española y por extensión los ODS-2030, y en particular el Objetivo Estratégico 7 de la Agenda Urbana: impulsar actuaciones orientadas a reconfigurar el actual modelo turístico del país rolando hacia planteamientos con mayor peso de la sostenibilidad, la digitalización o lo local... consecuencia directa dela alta especialización que presenta la economía española en relación con este sector (representa el 14,3% del PIB español, frente al 9,5% de la Unión Europea). Como decía no hace mucho la Ministra Maroto, ”tenemos la imperiosa obligación de asumir la responsabilidad de reducir los impactos ambientales del turismo, y afrontar a la par el reto de su integración social, económica y cultural…”, toca pues actualizar el modelo competitivo del sector turístico español, poner en valor su importancia economía e integrar nuevos factores de competitividad como la sostenibilidad, la calidad, el conocimiento y la innovación.

Situación actual del sector turístico en Europa

El sector del turismo en la Unión Europea (proveedores tradicionales de viajes y servicios turísticos) afecta directamente a 2,3 millones de empresas, en su mayoría pequeñas y medianas empresas (pymes), y da trabajo a unas 12,3 millones de personas. En 2018, el sector “viajes y turismo”aportó al producto interior bruto de la Unión de un 3,9 % y representó un 5,1 % de la mano de obra total (casi doce millones de empleos). La contribución del sector turístico, si nos atenemos a empleo indirecto, eleva al 10,3 % la contribución al producto interior bruto y permite el 11,7 % del empleo total, lo que equivale a 27,3 millones de trabajadores.

En 2019, año de referencia pre-pandemia y más realista que 2022, se alcanzó la cifra de 1.500 millones de llegadas de turistas internacionales en todo el mundo (un incremento del 4 %), de las que 745 millones, un 50 %, corresponden a Europa.

Situación del sector turístico en España

El último informe del Banco de España advierte de lo virtual de la recuperación del turismo de 2022, respecto a los datos de pre-pandemia de 2019 ("La recuperación del turismo internacional en Españatras la pandemia"). Las principales conclusiones llaman a la moderación del optimismo ante un efecto rebote en, y sobre todo tras, el verano del 2023:

  • 2022 no fue tan excelente como parece, ni 2023 se presenta con perspectivas tan positivas.
  • Las llegadas de turistas no residentes a España, en el conjunto de la temporada veraniega, se situaron un 10,8 % por debajo de las cifras del mismoperíodo de 2019.
  • Larecuperación del turismo internacional se ha visto impulsada por la demanda embalsada de viajes internacionales y la bolsa de ahorro extraordinario acumulada tras dos años de pandemia
  • La velocidad de recuperación se ralentizó a lo largo de los meses de verano, con un comportamiento menos dinámico del turismo alemán y del británico. No confundir el gasto turístico nominal con el real.El gasto nominal (el valor total, sin corregir por la inflación) efectuado en España por los turistas extranjeros "también se aproximó a las cifras de 2019 en el tercer trimestre, situándose tan solo un 2,7% por debajo de las cifras de 2019". Como resultado, en el tercer trimestre de 2022 el gasto sin transporte, en términos reales, distaba un 9,8% de las cifras previas a la pandemia

El Banco de España igualmente recuerda la altísima dependencia, de los destinos y operadores turísticosespañoles, del transporte aéreo (83% de las llegadas en 2022) y en este sentido llama la atención sobre su coste (económico y ambiental), "el cual se puede encarecer en el contexto de la transición verde en la que está inmersa la UE, que podría acarrear un encarecimiento de los costes de los vuelos en avión debido a las emisiones que genera este medio de transporte con la tecnología actual".

Los cambios necesarios a realizar en la cadena de valor del turismo, en España, para evitar morir de éxito o que este se lleve por delante la sostenibilidad:

  • Se requieren inversiones, también necesarias para renovar y mejorar las zonas turísticas, en particular de los puntos más saturados y mercados maduros
  • Fortalecer el atractivo de España como destino de turismo de negocios, urbano y cultural, evitando procesos de gentrificación y masificación, sobre todo en “ciudades culturales”
  • Incrementar el gasto medio no el número de turistas y perseverar en la mejora de la calidad percibida de los servicios
  • Oferta más personalizada y comprometida ambientalmente.
  • Diseñar y aplicar correctamente los planes de inversión en el sector turístico financiados a través de los fondos Next GenerationEU, vinculados a buenas prácticas ambientales y de sostenibilidad
  • Implementar la cadena de valor de forma global y trasversal, en forma de redes: planificación, comercialización, servicio, evaluación…
  • Crear valor añadido con ideas innovadoras y creativas para aportar las mejores experiencias pero generando sinergias turista / destino y turista/vecino
  • Funcionamiento más eficiente y comprometido de los Clusters
  • Afrontar sin más dilación el desafío tecnológico. DIGITALIZACIÓN.
  • Dar la espalda al #Greenwashing turístico
  • Interiorizar de una vez por todas los criterios de la Agenda 2030 y Agenda Urbana Local en sus prácticas. Incorporar criterios selectivos (priorizando la compra verde)

Retos sectoriales para frontary superar, desde la cooperación, las principales barreras para los agentes turísticos en la transición hacia modelos de negocio más sostenible:

Ser capaces de equipararse a otros sectores en términos de innovación, tecnología y conocimiento…

Superar la falta de sinergias en los territorios (cada uno hace su guerra no sirve)

Romper con la falta de especialización.

Poner solución a las dificultades de financiación: mala orientación de subvenciones y falta de apoyo al incremento de fondos propios.

Modificación de una legislación no acorde con nuevos tiempos y nada orientada a la sostenibilidad.

Romper con el modelo de “Mercado impermeable” a nuevos operadores en manos de pocos “grandes”.

Apertura efectiva a alianzas público - privada

¿Hasta qué punto pueden ser sostenibles los viajes lowcost?

Tal y como los entendemos ahora NO PUEDEN. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, el 72% de la emisión de gases de efecto invernadero proceden del tráfico rodado: 14% del aéreo, 13% del marítimo y tan solo el 0,5% del tren. Visto así, un viaje en avión supone casi 10 veces más emisiones de CO₂ que un viaje en ferrocarril en Europa. Pero, si hablamos de la perspectiva mundial, la aviación contribuye con un 2% de emisiones, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA). La cosa cambia con la perspectiva. La batalla de la movilidad debe pasar al centro del debate, si queremos que conceptos como ”la democratización del turismo” no sea un problema irreversible y ante el que tomar medidas restrictivas.

La sostenibilidad está ganando pero ‘la cabra siempre tira para el monte’. Argumentos como la “democratización” no se sostienen más que como disculpas para la inacción. Las instituciones deben actuar sin dilacción, las industrias (especialmente la de combustibles) también . No se trata de compensar, se trata de no emitir. Las tasas NO pueden tener fin compensatorio sino preventivo.

Todo completado con la necesidad de aprender a consumir, es crucial para poder equilibrar todo el desastre que estamos provocando. La educación y la comunicación son las herramientas decisivas en este cambio tan necesario.

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