Utilizamos cookies para mellorar a experiencia do usuario e analizar o tráfico do sitio web.

Preferencias

Cando visita calquera sitio web, pode almacenar ou recuperar información a través do seu navegador, xeralmente en forma de cookies. Dado que respectamos o seu dereito á privacidade, pode optar por non permitir a recompilación de datos de certos tipos de servizos. Con todo, non permitir estes servizos pode afectar a súa experiencia.


SalmonLink, un proyecto para la conservación del salmón atlántico en Portugal

Las poblaciones de salmón atlántico que se encuentran en Portugal están muy amenazadas. Sus principales amenazas están relacionadas con la construcción de presas y otras barreras a su migración; con una legislación inadecuada y la falta de aplicación de la ley; y con el cambio climático y el calentamiento global, fenómenos especialmente acuciantes en Portugal (ya que representa el límite sur de la distribución mundial de esta especie). En este sentido, la Universidad de Évora, con el apoyo de MARE, se unió a la comunidad de pescadores comerciales y recreativos en el proyecto SalmonLink. El objetivo principal de esta iniciativa es aumentar el conocimiento sobre esta especie y contribuir así a mejorar los programas de gestión y conservación del salmón atlántico en Portugal. Así, el proyecto SalmonLink está coordinado por la Universidad de Évora, con el apoyo técnico-científico y logístico de MARE – Centro de Ciências do Mar e do Ambiente. Sus socios son VIANAPESCA, OP – Cooperativa de Produtores de Peixe de Viana do Castelo, la Associação De Profissionais De Pesca Do Rio Minho e Do Mar (APPRMM), y la Associação Desportiva e Cultural dos Jovens de Longos Vales (ADCJLV). Está financiado por los Fondos Europeos (FEMP – Fondo Europeo Marítimo y de Pesca), más concretamente por el Programa Operativo MAR2020. En otras palabras, el proyecto es una contribución de científicos y pescadores a la conservación y gestión participativa de las poblaciones de salmón atlántico en Portugal. Esto se consigue mediante el establecimiento de una red de contactos y colaboraciones a nivel nacional entre científicos y pescadores comerciales y recreativos en las zonas de presencia del salmón atlántico. De esta manera, se permitirá mejorar el conocimiento de estas poblaciones y, al mismo tiempo, en un contexto de transferencia constante de conocimientos entre las partes, adaptar la legislación pesquera actual a las necesidades de conservación y gestión de esta especie amenazada. El proyecto incluye cuatro acciones: primero, la pesca entre científicos y pescadores para la gestión participada del salmón del atlántico en Portugal; segundo, un estudio-piloto sobre la biología y ecología de las poblaciones nacionales del salmón atlántico; tercero, el contexto socioeconómico y cultural de la pesca de la especie en Portugal y definición de alternativas sustentables a su exploración; y, por último, la divulgación de los resultados y transferencia de conocimientos. En cuanto al área de intervención, SalmonLink se centra en las cuencas fluviales en las que se encuentra el salmón atlántico en Portugal, (concretamente en los ríos Miño y Lima), así como en los ríos Cávado y Duero, donde se detecta ocasionalmente la presencia de la especie. Jornada técnica Los distintos trabajos y resultados del proyecto SalmonLink fueron presentados días atrás en la localidad portuguesa de Monção, donde participaron diversas personalidades y técnicos relacionados con la iniciativa. Pedro Raposo, director del proyecto MARE, afirmó que invertir en mejoras de espacios sin intervenir en la mejora de los ecosistemas es un error que frustra objetivos. El valor de un salmón y su aprovechamiento lúdico, deportivo y social se convierte en miles de euros frente a unas pocas decenas o centenares de euros cuando se pesca directamente. Este es un argumento fundamental para defender la pesca sin muerte y un sentido comercial de esta. Raposo también ha indicado que las poblaciones de salmón en el río Miño son de las más perjudicadas de la especie en todo el mundo. Por ello, el trabajo conjunto entre Portugal y España (y particularmente Galicia) es una obligación ineludible e inaplazable. Augusto Porto, de Agnatha Minho (asociación creada para la promoción del potencial del río Miño), ha indicado que en este río hay un total de 110 barreras entre el mismo y sus afluentes; y que sus consecuencias ecológicas y ambientales son graves, ya que impiden el normal desarrollo reproductivo y la supervivencia del salmón, de la lamprea y de la anguila. Por este motivo, urge que se trabaje a los dos lados del río Miño y, al mismo tiempo, que se articulen medidas legales que permitan preservar y defender el río y sus especies. El Miño está a tiempo de volver a ser como era hace cuatro o cinco décadas, es decir, un destino para la pesca desde muchos lugares del mundo. Por su parte, el alcalde del municipio de Monção, António Barbosa, ha destacado que el Miño puede y debe ser una fuente de riqueza para los municipios de ambas orillas del río. Así, defendió modalidades como la pesca sin muerte y pidió favorecer su cuidado, ya que aporta abundante riqueza de tipo turístico. En este sentido, salvar el salmón significa salvar el propio río. Según Barbosa, es necesaria una armonización legislativa entre España y Portugal. No es aceptable que las potencialidades queden anuladas por la falta de protección y que, a su vez, las normativas de protección no sean análogas a los dos lados del río Miño. Pablo Caballero, jefe de servicio de pesca de la provincia de Pontevedra, participó con una ponencia sobre la situación del salmón en la provincia pontevedresa. Destacó que, desde finales de los años 80, el declive es muy significativo en todos los ríos de Galicia. Por otra parte, los hábitats y su degradación han sido los principales responsables tanto en el ámbito costero como en el de aguas interiores dulces. En 1950, 14 ríos salmoneros existían como tales en el Atlántico de Galicia. Hoy en día, apenas 5 pueden considerarse ríos para una práctica habitual. Caballero subrayó también los cambios de carácter biológico, relacionados con los ciclos reproductivos: se pasó en muy pocos años de pesos entre los 7 y 10 kilos a apenas 5 que alcanzan hoy la gran parte de las capturas en muchos ríos, como en el caso del Ulla. De hecho, según las primeras referencias de pesca que se conservan de este río, se producían habitualmente capturas de animales de entre 15 y 20 kilos. En este sentido, la sobrepesca está entre las principales razones del declive del salmón. Caballero también señaló que la tasa de retorno de los peces criados en cautividad es muy baja, pero se está comprobando que no solo vuelven a la estación de cría que está en ubicada en el Lérez, sino que se han registrado retornos de salmones después de completar su ciclo Atlántico a otros ríos de la comunidad autónoma. Valor, conservación y amenazas del salmón atlántico El salmón atlántico es una especie migradora anádroma que remonta los ríos para realizar su reproducción. Desde SalmonLink se explica que este pez tiene un alto valor socioeconómico, ya que es muy apreciado en la pesca recreativa y tiene una gran importancia en términos gastronómicos. En algunos países (como Noruega y el Reino Unido) se cultiva de forma intensiva. Por su parte, la especie está actualmente clasificada como "Criticamente em Perigo" – CR, según el Livro Vermelho dos Vertebrados de Portugal. La principal amenaza para la supervivencia del salmón es la pérdida de hábitat causada por la construcción de presas y otros obstáculos que interrumpen la continuidad longitudinal de los ríos. Otros factores, como la contaminación del agua, la degradación de las galerías ribereñas, la extracción de áridos de los lechos de los ríos y la extracción de agua para diferentes usos, han contribuido a la degradación de los hábitats preferidos por esta especie. Además, el proyecto resalta que el cambio climático, con el progresivo calentamiento global y el aumento de la frecuencia de los períodos de sequía, contribuye a agravar el impacto causado por la reducción del hábitat. Otro impacto que afecta significativamente a esta especie es la mortalidad resultante de la actividad pesquera, especialmente en las zonas de alimentación marinas y durante su migración de reproducción, además de la mortalidad resultante de la caza furtiva.

Comparte esta noticia